Canción de día: Me haces bien

Aunque siento que el comercial de una marca de pollos haya matado esta canción de Jorge Drexler (en realidad podría nombrar varios comerciales más que han matado muy buenas canciones), me sigue gustando mucho...

Para contarte, canto
quiero que sepas
cuánto me haces bien
me haces bien
me haces bien

Te quiero de mil modos
te quiero sobre todo
me haces bien
me haces bien
me haces bien

Basta ver el reflejo de tus ojos en los míos
como se lleva el frío
para entender
que el corazón no miente
que afortunadamente
me haces bien
me haces bien
me haces bien 

Con amor, D.

Patiperreo: Parte I

Después de varias semanas de andar por aquí y por allá (nuevamente) al fin regresé a mi hogar. Extrañaba todo: mi casa, mi cama, mi papá, mamá, hermanas, mi gata, mi Benito (mi gato), mi playa, mi closet (esto sobretodo, pues para viajar cómodamente uno no debe llevar muchas cosas, y anduve paseando con la misma ropa tres semanas!), y un montón de cosas que sólo el hogar tiene. Ahora creo que estaré una temporada en mi casita, pues de vedad que no tengo ganas de volver a subirme a un bus.

Si bien había subido fotos de los viajes, ahora les dejo las que tenía en mi cámara análoga, y que revelé hace poquito. Espero que les gusten, después subiré el resto.

Cariños varios

 D. [Cansadita de viajar]

Viaje

Plaza de Pisco Elqui

Panorámica desde un cerro de Diaguita

Como ya se me hizo costumbre nuevamente salí de viaje (y aún estoy en el). Todo comenzó porque estuve en Santiago una semana haciendo trámites varios y derrepente me dieron ganas de no volver a Pichilemu e irme a cualquier lugar. Esta vez el sitio elegido fue la cuarta región, especificamente el Valle del Elqui, lugar maravilloso en esta época del año pues por unos dias me olvidé del frío de la zona central. Creo que las imágenes hablan por si solas, la he pasado super bien y aún no tengo ganas de regresar.

Muchos cariños

D.

Estado de ánimo

[...]

Pero hoy me siento apenas 

como laguna insomne 

con un embarcadero 

ya sin embarcaciones 

una laguna verde 

inmóvil y paciente 

conforme con sus algas 

sus musgos y sus peces, 

sereno en mi confianza 

confiando en que una tarde 

te acerques y te mires, 

te mires al mirarme. 

Estados de ánimo, Benedetti